La Leyenda del Indio Tlaxcalteca del Ojo de Agua en Saltillo

Desde el más allá llegó para rendir culto a uno de los patronos de Saltillo, así lo recuerda doña María de la Cruz, quien relata su historia

Ya son varios los vecinos del barrio del Ojo de Agua que juran haber visto deambular por las polvorientas calles y las profundas barrancas del arroyo «La Tórtola«, al fantasma de un Indio tlaxcalteca que suele aparecer en los últimos días del verano antes de despuntar el alba.

Doña María de la Cruz Gloria, quien vive a orillas de este arroyo, en las calles de Constitución y Fortín de Carlota, también lo vio.

Ocurrió en la víspera de la fiesta del Santo Cristo del Ojo de Agua, una madrugada que doña Cruz se levantó para despedir a uno de sus hijos que se iba a trabajar.

La mujer narra, con el miedo pegado en el rostro, que al salir a la calle rumbo al cuarto de baño que se encuentra afuera de su vivienda, miró al fondo de la barranca poblada de chaparros, a un señor que llevaba puesto un gran sombrero de palma, un sarape de colores y un morral.

El hombre permanecía quieto, recargado en una de las paredes almendrilladas del arroyo y con la cabeza apoyada en un bordón, como si durmiera.

Un escalofrío recorrió a doña Cruz, quien al principio pensó se trataba de alguno de los matachines que ese día danzarían en la fiesta de la iglesia.

La mujer siguió su camino hasta el baño. A su regreso echó otra mirada al fondo del arroyo: el hombre del sarape no se había movido.

«Así duró como dos horas, mis familiares también lo vieron y decíamos: `qué raro, pos quién será ese señor… y qué hace en el barranco'».

A las 6:00 de la mañana que doña Cruz salió a la tienda para comprar pan y leche, miró con asombro que el indio aquél había desaparecido.

Otros lugareños del barrio del Ojo de Agua refieren haber visto dormido a pie tirante detrás de la iglesia a un indio con la cabeza y el cuerpo de un gigante «¿Será cosa de este mundo?», todos se preguntan.

Publicada en Vanguardia el 31 de Octubre de 2018